Pues hoy, aprovechando que tenía el coche aparcado por allí, se me ocurrió pasarme por Class antes de irme a casa a comer. Así que llamé para saber exactamente la ubicación actual del piso y allí me presenté. Debo decir que la situación del piso me gusta más ahora; está en una calle mucho más discreta que antes.
Llego y me pasan a las tres chicas que tenían. La primera, Ivón, estaba bastante bien: muy delgada, sin un gramo de grasa, bonita figura y cinturita, aunque normal de cara. Es sin duda la chica de las fotos de la web de Class, ya que me recibió en lencería y se le veía el tattoo del abdomen al igual que en las fotos.
Luego entró Ainhoa, que si bien de cuerpo no estaba mal, tal y como se aprecia en las fotos de la web, su punto flaco estaba en lo que las fotos ocultan: la cara. Un auténtico espanto, señores. ¿Os acordáis de Reiziger, aquel futbolista holandés que jugaba en el Barça de Van Gaal? Pues Reiziger parece guapo al lado de ésta. Con eso creo que está todo dicho.
Por último, entró otra chica sudamericana, que cuando entró por la puerta pensé que sería la chica de la limpieza o que venía a buscar algo a la sala donde yo estaba, pero lo último que se me pasaba por la cabeza era que fuera lumi, pues ni por físico ni por indumentaria lo parecía. Al contrario que las otras dos, ésta iba vestida de calle y nada sexy. Era jovencita, sí, pero con el típico físico de ecuatoriana: tapón de menos de metro y medio de alta y algo entrada en carnes; nada apetecible, vamos. Entre que no me llamó la más mínima atención y el susto que me llevé al ver a la anterior, ni me quedé con su nombre. Me imagino que será la que aparece como "Carita de ángel" en la web, la que no tiene foto. Y no me extraña que no tenga foto.
De las otras dos que aparecen ahora mismo en la web, una no fue a trabajar hoy y la otra empieza mañana.
Así que nada, tras el bajón que me dio después ver a la segunda y a la tercera, le dije a la mami que no era lo que buscaba y me fui. La verdad es que podría haber entrado con la primera, que a mí me gustó, pero os juro que se me quitaron repentinamente las ganas de follar...
Por cierto, la mami era una chica del este bastante jóven y no estaba nada mal. De hecho, estaba mucho mejor que la segunda y tercera chica del paseillo. Era bonita de cara, rubia y con los ojos claros; además era muy alta (yo diría que metro ochenta y poco), aunque ancha de espaldas. Ganas me dieron de preguntarle si me la podía follar a ella