Amante2017
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Tras un tiempo sin poder coincidir con Luna, una de mis dos musas rusas, consigo quedar con ella hace poco más de una semana. Desde hace poco atiende en un piso en un edificio relativamente nuevo, cerca del Gimnasio EGO. Me cuesta encontrar aparcamiento, pero al final llego solo 5 min más tarde de la hora acordada.
Luna abre la puerta cuando entro al umbral del hall, subiendo las escaleras. Tan sonriente y atractiva como siempre, maquillada, pero con estilo, sin estar recargada. Me encanta su dulzura y su cuerpo me enamora. De hecho, solo entrar, le he dado un abrazo tierno, sentido, expresando el deseo que tenía de estar con ella. Los que la conocéis sabéis que ya hace tiempo que dejó de ser una pipiola, pero es tan linda y tiene una sonrisa tan juvenil… con esos ojitos eslavos, y esa melena rubia platino, larga y lacia… Nos ponemos al día y nos besamos apasionadamente entre frase y frase.
La casa tiene varias habitaciones, entramos en una un tanto oscura, amplia, con un colchón en el suelo (en donde lo hicimos), y un somier en otro lado… Le pago rápido 50€ por media hora (no me gusta este trámite con Luna, es como si sobrara, o como si fuera poco para todo lo que me da… pero es que en verdad con media hora disfrutamos de mucho y buen sexo… y como no relojea… pues eso).
Se va desnudando mientras seguimos hablando, me quito la camiseta, y ella me baja los pantalones, me saca la amiga y comienza una tierna mamada sin.
Vamos a la cama, la beso, le hago un sentido cunnilingus, por delante y a cuatro patas, que no dura mucho porque ella no se quiere correr aún… jeje… le acerco discretamente un dedo a la raja del culo, pero no llego a meterlo… Se lubrica con facilidad. Más morreos. Y con ganas de sentir a mi amiga dentro me pone el condón con una tierna mamada, y para adentro. Ella encima mía, me cabalga… con un gustazo… yo disfruto de sus hechuras, su culo, sus pechos, su todo… su cuello (con esa cadenita dorada, tan chic)… no tengo que frenarme en nada, y eso no tiene parangón… la puedo besar, chupar, acariciar cuerpo y pelo… Como dos amantes que se reencuentran… lo que se viene a denominar una folla-amiga (aunque no me guste mucho el calificativo).
Luego a cuatro patas, me lo pidió… así disfruta mucho. De frente, erguidos ambos, se echa hacia atrás, apoyada en sus manos…¡qué visión! (“contigo vale la pena vivir”… me salió del alma). Lo mismo no es un pibón de libro, pero está buenísima, y disfruta y hace disfrutar. Hay por donde agarrar… me encanta.
Le propongo la cuchara para acabar… ella no aguanta y se corre antes… Yo tardo un poco, porque su sexo está tan lubricado que a veces no sentía el miembro dentro. La corrida fue tierna, llena de pasión… ambos sudorosos…. Chupados y besados.
Con ternura me quita el condón. Yo tumbado, entonces me acaricia el torso y piropea mi cuerpo (“¿de veras? pero si tengo tripa cervecera”; “¡eso todos!” me responde con una amplia sonrisa)… Más conversación amistosa, y nos despedimos cariñosamente, con besos y abrazos sentidos… ¡Hasta pronto encanto!
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