Amante2017
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Hoy quería conocer a Sandra, una de las chicas de Luna que aún no había catado y que llevaba tiempo sin aparecer por Almería (de hecho luego ella me confirmaría que había estado 2 años sin trabajar en esto…). El encuentro tuvo lugar el pasado viernes por la mañana.
Llegué puntual, a pesar del tráfico (aparqué en un callejón cercano). Al lado de Casa Luna están de obras pues van a construir un edificio de tres plantas… vaya, eso le quitará un poquitín de intimidad a su calle… pero sigue siendo un magnífico sitio, además se puede uno aproximar por la esquina más cercana a la “casa del placer ruso” .
Vayamos al tema. Entro y Luna me presenta a la guapa Sandra. Es una rusa alta, de pelo lacio larguísimo y muy rubio, joven (le echo veintitantos), guapa, con ojos vivarachos y sonrientes, nariz pequeña y puntiaguda y labios finos. Es sin duda la de las fotos (inconfundible con su tatuaje en la parte alta del culo), aunque con bastantes kilos de más (ay! el confinamiento…!). Pero lo que más destaca de ella son unos pechos naturales de talla XXL, gustosos y muy magreables… como podría comprobar en unos minutos.
Luna se despide de mí con un pico (creo que va a caer la próxima… ¡ja!) y Sandra y yo subimos a uno de los dormitorios de arriba. A propósito, no os lo vais a creer, pero tras visitar esta casa ya varias veces, ha sido en esta ocasión cuando he visto la famosa “cortina en donde me suelo esconder…” ? ? …
Sandra tiene buena conversación, y habla muy bien español. Acordamos media hora y le pago el correspondiente billete de 50. Paso por el baño para asearme y regreso al dormitorio, en donde nos desnudamos y comenzamos a besarnos y tocarnos mutuamente. En realidad, aunque hubo algún beso con lengua, Sandra no los buscaba y no quise insistir… Me centré en sus pechos tamaño maxi… te puedes perder en toda su extensión… mientras mi polla se va animando cada vez más al sentir la suave piel hiper blanca de la eslava… Me tumbo en la cama y me hace una fellatio muy tierna y salivada. No me hace una garganta profunda, pero me gusta y lo disfruto… acaricio su larguísimo pelo rubio natural lacio… su linda cara… No hubo pasión, más bien fue un encuentro tierno, relajado y muy sensual.
Le digo de besar su “cosita”, le parece bien y se pone boca arriba. Mi lengua trabaja a conciencia de arriba abajo, apretando sus labios vaginales en toda su extensión, rozando con la punta su clítoris… y luego medio metida dentro de izquierda a derecha… Sandra suspira… se diría que podría correrse, pero al final no llegó a ese punto de no retorno…
Pasamos al folleteo. Un poco de mamada y colocación de la goma, a la que le pone lubricante en cantidad… Estamos en la cama de rodillas… y aunque pensé en meterle la polla en su coño rosado tal cual estábamos, al final le pedí que se tumbara para un misionero… Cuando introduzco mi pollón dentro de la rubia, ella comienza a emitir gemidos y algún gritito… hasta el punto que le pregunté si le estaba gustando (¡¡¡síiiiii!!!) .
Acelero el mete saca y aprieto bien hacia adentro… pero no era cuestión de correrse tan pronto, así que le propongo a los pocos minutos, y tras el correspondiente magreo de sus pechos y besos en su blanco cuello, que cambiemos a las 20 uñas.
Ella coloca su hermoso culo (no he comentado que también es de talla XXL, terso, sin una estría…) en pompa… se deja caer en la cama… y gime con una expresión sublime, mezcla de placer y dolor, mientras la penetro… (oye, ¡y no era un griego!). Sandra suda por la espalda, yo me apoyo en ella, mientras aprieto con fuerza mi polla dentro del calor de su volcán… aprecio los hermosos tatuajes que porta la hetaira y sigo apoyándome en su espalda, en su cintura, mientras la atravieso sin piedad… En un momento dado sujeto con las manos sus hermosas tetas, ella se endereza un poco, en la posición perrito, reposo mi pecho sobre su espalda sudada… y entre jadeos cada vez más rápidos termino eyaculando toda mi leche en el calor de su coño lubricado.
Satisfecho me dejo caer en la cama y Sandra, siempre cariñosa y sonriente, me retira el condón y me da una toallita para que me limpie.
Conversación intrascendente, me visto… y bajamos al recibidor en donde una siempre alegre Luna me dice que a ver si trae nuevas chicas para que las siga probando… pero le digo que lo más seguro es que la próxima sea ella… porque necesito volver a catarla.
Espero que os haya gustado la experiencia compañeros. Seguid follando que la vida son dos telediarios .
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