Pues que nos quiten lo bailao.... ya solo nos quedan los recuerdos y, con suerte, algún sueño húmedo que otro... No me imagino cómo volver a la normalidad del puterío, salvo que el virus sea historia dentro de unos meses (que puede ocurrir, oye). Lo de las vacunas yo no lo veo nada claro. Ánimo...