Durden
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Nooo hombre, si yo no dudo de la palabra de nadie, pero si veo contradicciones en una expe y me asalta la duda pues me gusta aclararla. Pero vamos, que para despistao yo el primero, y si por algún motivo se ha ampliado el tema de la hora feliz me gustaría saberlo, porque en mi opinión es lo único que le falta a esta casa para ser aún mejor.
En cuanto a lo que dices Olgreen, permíteme discrepar en parte. Yo creo que una profesional sí que puede elegir, para eso existen biombos y cosas de esas. En mi opinión, siempre deberían de tener esa opción y esa libertad al igual que nosotros elegimos a la chica que nos gusta y luego nos arriesgamos a que el encuentro no sea todo lo agradable que nosotros quisiéramos. Ellas puede que pongan en riesgo su integridad moral o como quieras llamarlo al tener que follar con alguien que no les gusta, pero nosotros también ponemos en juego nuestro dinero y nuestra autoestima. Pero claro, si tuvieran que eliminar clientes por algún defecto genético como dices creo que iban a trabajar poco. No nos olvidemos que esto es una transacción comercial, no creo que estén aquí para encontrar a su príncipe azul, al contrario, cuando quieran enamorar aquí no lo van a buscar.
Dicho esto no creo que la mayoría de los cliente sean como tú los describes (que también los habrá, claro), prefiero pensar que la mayor parte de los "puteros" son gente normal que busca sexo rápido y fácil, porque no creo que haya estómago que aguante a diario la pléyade dre romeos que describes (yaa, que sé que es coña), aunque seguro que en muchas ocasiones debe ser complicado.
Y a ver si dejamos de autocompadecernos compañero, me duele ver a alguien tan cabal e inteligente como tú quererse tan poco. No te conozco personalmente, pero estoy seguro de que posees cualidades muy buenas y que mucha gente sabrá valorar, sólo hay que leerte para poder intuirlo. Yo no me considero un "putero" al uso (tú tampoco creo que lo seas), como tampoco creo que una buena profesional sea una simple "puta", las hay mucho peores y que no cobran por ello. No me avergüenzo de ser una persona a la que le gusta el sexo y no tengo ningún problema en pagar por ello mientras me queden ganas, dinero y motivación. Así que como te oiga otra vez hablar mal de ti te las vas a ver conmigo, he dicho. Ale, se acabó la terapia por hoy.
En cuanto a lo que dices Olgreen, permíteme discrepar en parte. Yo creo que una profesional sí que puede elegir, para eso existen biombos y cosas de esas. En mi opinión, siempre deberían de tener esa opción y esa libertad al igual que nosotros elegimos a la chica que nos gusta y luego nos arriesgamos a que el encuentro no sea todo lo agradable que nosotros quisiéramos. Ellas puede que pongan en riesgo su integridad moral o como quieras llamarlo al tener que follar con alguien que no les gusta, pero nosotros también ponemos en juego nuestro dinero y nuestra autoestima. Pero claro, si tuvieran que eliminar clientes por algún defecto genético como dices creo que iban a trabajar poco. No nos olvidemos que esto es una transacción comercial, no creo que estén aquí para encontrar a su príncipe azul, al contrario, cuando quieran enamorar aquí no lo van a buscar.
Dicho esto no creo que la mayoría de los cliente sean como tú los describes (que también los habrá, claro), prefiero pensar que la mayor parte de los "puteros" son gente normal que busca sexo rápido y fácil, porque no creo que haya estómago que aguante a diario la pléyade dre romeos que describes (yaa, que sé que es coña), aunque seguro que en muchas ocasiones debe ser complicado.
Y a ver si dejamos de autocompadecernos compañero, me duele ver a alguien tan cabal e inteligente como tú quererse tan poco. No te conozco personalmente, pero estoy seguro de que posees cualidades muy buenas y que mucha gente sabrá valorar, sólo hay que leerte para poder intuirlo. Yo no me considero un "putero" al uso (tú tampoco creo que lo seas), como tampoco creo que una buena profesional sea una simple "puta", las hay mucho peores y que no cobran por ello. No me avergüenzo de ser una persona a la que le gusta el sexo y no tengo ningún problema en pagar por ello mientras me queden ganas, dinero y motivación. Así que como te oiga otra vez hablar mal de ti te las vas a ver conmigo, he dicho. Ale, se acabó la terapia por hoy.